Acaso desconoces lo que en tu ser ya conoces?
Acaso me desconoces a mi?
Acaso desconoce el hermano a la hermana?
Acaso se han fundido la experiencia,
la convivencia, en actuaciones vanas?
Si, asi parece.
Vano, vanos caminos recorren esos seres,
caminos llenos de tropiezos, pero de enseñanzas,
caminos llenos de rosas, de espinas,
caminos de muerte pero tambien de vida,
cuantos caminos se caminan cada día,
y no sabemos el rumbo, el destino de nuestros días.
Sospechamos saberlo, sospechamos saber algo;
pero solo es eso, un sospechar.
Desconoces la esencia de ella,
desconoces la esencia de el;
yacen esos buitres desconociendo
pero a veces su esencia si conocemos,
algunas veces somos ellos,
algunas veces somos buitres,
aves de rapiña, solo algunas veces.
Pero aun sabiendo tales cosas,
aun aquellos buitres se maquillan de rosas,
aun perciben el aroma de la rosa,
y la degustan, no son malos;
son en esencia aquello que a veces conocemos,
en aquellos, en ella, en el y en mi.
Cuanta búsqueda de la cumbre,
cuantos buscan la cumbre,
pero que es la cumbre?
La cumbre es aparente felicidad
que no se tiene en el presente,
la autorrealizacion que se anhela
en el presente;
la otra vida que se anhela en el presente;
que eso es cierto?
es mentira de las gentes;
una cumbre no es nada
si buscar la felicidad no adorna la mente;
primeramente.
Y continuan los buitres, los tuyos,
y los de todos;
en la búsqueda de la cumbre;
y a cada aleteo del ala negra;
millares de palomitas captan el vuelo;
lo captan y al igual lo aprenden;
y asi aquello que debio ser
manantial de palomitas azules,
de palomitas azules de hermoso canto;
se convirtio en bandada de buitres
carentes de encanto.
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