Los lirios en los campos bailan al son de la brisa,
el agua de los ríos se desplaza uniforme
a veces lenta y a veces deprisa.
Por qué nosotros no nos dejamos llevar
por los músculos del rostro que dibujan una sonrisa.
Tan largo es el camino, tan corta es la vida,
deja la indecisión, es tiempo que decidas
colocar letrero en tu mente que simplemente diga
soy flexible a sonreír, soy flexible a comprender,
soy flexible a vivir,
soy yo, pero también soy aquel,
mi dolor también, dolor de él
y mi llanto, en sus ojos, alguna vez reposó.
Flexible a la humanidad,
flexible a ser mejor,
flexible a ser un ser
cuyo emblema es el amor,
cuya insignia es la virtud,
cuyo destino, eternidad.
