9 de noviembre de 2013

Poema #25 Pétalos



Una historia cuenta el
una historia cuenta ella
una historia de sus quebrantos
una historia de sus llantos
una historia de su razón de vivir
una historia de su historia.

Capullos florecen día a día
y a la par rosas se empapan de melancolía
mis rosas danzan con ellas
a diario, casi a diario, a veces no,
a veces si.
Vivir sujeta a ellas
en la génesis del tiempo, desesperante condición
mas en tiempos de cosechas
de madurez digerida, esa rosa negra
llamada melancolía
cambia mi soledad en alegría;
pétalos negros transformados en láctica sustancia
en mis manos se deshacen
de mis manos mis ojos los arrancan
esos pétalos ya no están
pero si están
yacen en mi pelo.
En mi oscura cabellera.

Observo los pétalos oscuros
y grises
sobrevolar alrededor mio
con mis manos los toco suavemente
y en mis manos se deshacen
lentamente
esos pétalos negros parecidos a mis plumas negras
a mis plumas de cuervo
son incomprensibles
pero son así
son lo que son
y aunque alojados en mi cabellera
parecieran peso pesado
al igual para mi forman diadema
diadema anhelada
magna corona ganada
inclino mi vista al horizonte
veo muchas aves de alas grises
con pétalos negros en sus picos
en sus patas
en sus ojos
en sus plumas
y en sus garras
y entiendo
para algunos es adorno
que insta a luchar
para otros peso pesado
difícil de superar
nuestra limitante, nuestro pétalo negro
puede convertirse en adorno
en una estrella oscura que con el paso
del tiempo, logra relucir, brilla
pero para otros puede ser
la incapacidad de despertar
de una horrenda pesadilla.

7 de noviembre de 2013

Poema #24 El Oasis



Cuando la luna empezo a sonreir?
cuando en la luz empezo el cuervo
a planear?

No queda alternativa,,,,,,,
otra opción,,,,,,,,
en lo oscuro de nuestro semblante
el cuervo decide graznar palabras
palabras de tono suave
de cero palabras amargas.

Cuervo somos
y volamos a otros senderos
a pesar de nuestra oscuridad
porque en el fondo,
aunque nuestras plumas oscuras sean,
poseemos una rosa en nuestro pecho
que nos empuja a graznar
dulces, mieles y nectares
a pesar de estar condenados
a pesar de poseer fachada
fachada gris, fachada por nadie anhelada.

Mira el cuervo a las aves
a las de alas grises
reir
rie con ellas
llorar
llora con ellas
suspirar
suspira con ellas
esas aves no estan ni con esta ni con aquella
son grises
ni blancas ni negras
son grises
ni malas ni buenas
pero el matiz oscuro destaca
pero el matiz niveo destaca
grises aves, hermosas aves
de plumas largas
son productos del cielo
o del averno
no se de donde son esas aves
esas cautivadoras aves
sus plumas son avenidas
y sus pensamientos son oasis
oasis en el desierto
no lo ves pero lo imaginas
ojala pudiera ese oasis consolidarse.

El cuervo explora sediento
observa oasis en el desierto que le ha tocado explorar
pero aun continua pensando
Sera esto lo que veo real?
Sera este oasis quien la sed me ha de quitar?
Cuanta imaginacion en las de alas grises
solo imaginación
solo letras
solo deseos de ser oasis
ellas desean, pero montones de cuervos
a diario mueren de sed
imaginando que algun dia hallaran el oasis.





Poema #23 El Lobo y el Cuervo



Un error, una confusión o una enfermedad;
oscura sombra, recuerdo doloroso, es eso, es eso
ese sentir, mi sentir mío.
Te recuerdo por ti nací en cielo añil.
Soy hija de tus lágrimas, de tu rocío,
por ti y por ella empezó mi destino, mi vivir.

Oh muerte que acabas con la vida,
con la vida de tus víctimas;
con la vida de los que quedan;
a mi alma la flagelas
al recordar tu negro sonido, tu negra luz;
te llevaste mi querido, te llevaste mi cielo azul.
Entenderte podía sin sentirte, ahora que te siento
no te entiendo.
Te llevaste las alas que me hacían volar;
soy hoy cuervo negro, negro cuervo sin alas;
cuervo que se arrastra en todos ratos;
alma sumergida en dolores, en absoluto ocaso;
tiempo necesita el dolor para desaparecer.

Te fuiste y no te has ido
siempre te llevo conmigo;
mi padre, mi aliado, mi amigo;
no pensé que ese fuera tu destino
nunca pensé que ese fuera mi destino
sufrir tu muerte
sufrir mi muerte
al ver que te has ido
y mi luz se fue contigo.

Caminaba en tus caminos
tus senderos, son mis pasos
tu risa, motor para mi
mis energías aumentaban con tu abrazo
nunca se romperá la unión de nuestros lazos.

Soy fauna y tu fauno
en este jardín de rosas
soy cuervo y tu lobo
le tememos a las serpientes venenosas;
Tenias grandes colmillos que a este cuervo
de día y noche protegían; donde está mi protector hoy?
No tiene este cuervo nada, este ermitaño y solitario cuervo,
solo tiene su doloroso graznido, su lamento
su luto eterno
su oscuridad en sus ojos
no tiene nada, ni siquiera alas;
deformado cuervo, solitario cuervo.
Cuervo muerto que aun muerto todavía grazna.

Si tuviera esperanza
de volver a escuchar tus nobles y caninos pasos;
si pudiera volver a escuchar tus aullidos a la luna llena;
si pudiera saber si desde el averno tus colmillos aun me protegen;
no sentiría tan desdichada mi existencia;
grazno y grazno no hay nada que hacer;
la esperanza no esta, la esperanza se fue.
La esperanza de algún día volverte a ver.

Lamento haberte graznado mal aquella vez
sin motivos;
quizás desquitarme con tu semblante canino
que es al igual mi semblante.
Cuervo maldito que llevo dentro, graznas tantas sandeces
sin control a veces.
¿Por que no aproveche el tiempo
de cantar la canción del lamento,
con corazón puesto en la mano;
ante aquel lobo antes de morir?
Quizás grazne, quizás grazne, quizás llore;
pero no lo suficiente;
quizás implore tu voz, tu consuelo, tu perdón;
pero no lo suficiente;
Ese lobo de carácter célebre, de hermoso pelaje,
en sus ultimo momentos, rodeado de extrañas gentes
siente el cuervo temor; su temor, su temor;
no le dio la gran despedida, ese fue el gran error;
ya es tarde hoy.
¿Mi amigo a donde has ido?
te fuiste lejos lo se;
olvidaste algo mi mejor amigo
a un loco cuervo con el corazón herido
al saber que te fuiste y no me llevaste contigo.
Añora este cuervo volver a ver a su lobo amigo.

En esa niebla oscura
sentado en una roca gris del negro jardín
acompañado de níveas aves de alas grises
permanece taciturno, tranquilo, callado
con dolor inquietante y corazón asustado
aquel negro cuervo de ojos tristes
destinado a graznar su dolor
para aquellas hermosas aves de alas grises.
Con su dolor arrollador; pero siempre tranquilo
permanece aquel negro cuervo
que perdió a su gran amigo.